A continuación, presento cuatro cuentos de terror para niños que les harán temblar de emoción. Estos cuentos están diseñados para ser divertidos y emocionantes, pero no tóxicos. La intención es que los niños puedan disfrutar de una historia de miedo sin que les causen trauma. ¡Disfruten!

La casa embrujada

Había una vez una pequeña casa en el bosque que todos decían que estaba embrujada. Nadie se atrevía a entrar, pero una curiosa niña llamada Ana decidió investigar. Cuando llegó a la casa, se dio cuenta de que estaba vacía, pero empezó a escuchar ruidos extraños y a ver cosas raras. Finalmente, descubrió que la casa estaba habitada por espíritus malvados y tuvo que escapar corriendo para salvar su vida.

El monstruo debajo de la cama

Cada noche, un niño llamado Juan se despertaba asustado porque creía que había un monstruo debajo de su cama. Sus padres intentaron tranquilizarlo diciendo que no había nada allí, pero Juan no podía dejar de preocuparse. Una noche, decidió investigar por sí mismo y descubrió que había un monstruo de verdad debajo de su cama. Afortunadamente, logró escapar y nunca volvió a ver al monstruo otra vez.

La muñeca poseída

Una niña llamada Sofía recibió una muñeca de porcelana de su abuela, pero algo extraño empezó a suceder con ella. La muñeca parecía moverse sola y hablar con una voz extraña. Sofía intentó deshacerse de la muñeca, pero no podía, pues estaba poseída por un espíritu malvado. Finalmente, con la ayuda de un sacerdote, logró liberarse de la muñeca y volvió a tener una vida normal.

El espejo maldito

Un niño llamado Alberto encontró un espejo antiguo en el desván de su casa y lo llevó a su habitación. A partir de ese día, empezó a ver cosas extrañas en el espejo, como figuras oscuras y sombras. Alberto intentó ignorarlo, pero pronto descubrió que el espejo estaba maldito y que su vida estaba en peligro. Con la ayuda de un experto en antigüedades, logró romper el espejo y liberarse del mal que lo había poseído.